Se perdió un partido que puede ser clave de cara a la salvación, contra el último clasificado, y ahora somos nosotros los últimos. Se repitió el guión de ya varios partidos este año: empezamos muy bien (2-11 min. 6, tres triples), con acierto en los triples y juego más o menos fluido, llegamos con vida a los últimos minutos y ahí el rival aprieta en defensa y nos colapsamos en ataque, acusando la falta de jugadores en la rotación. Pero también se repitió algo que no podía desgraciadamente faltar: la lesión de un jugador, en este caso de alguien tan importante para nosotros como Juan Carlos. Faltaba un segundo para acabar la primera parte y sacábamos de fondo, con 32-37 en el marcador, recibe J. Carlos y medio girándose anota un triplazo, con tan mala fortuna que al caer pisa un jugador local. Los gritos de dolor denotan al instante que el esguince es fuerte y que desde luego no podrá jugar más. Estábamos siete arriba, después de haber dominado en la primera parte, pero la salida del tercer cuarto no pudo ser peor, quizás aún impactados por la lesión de J. Carlos, que había ocurrido justo delante de nuestro banquillo. Pasamos casi cinco minutos sin anotar, mientras el rival metía 14 puntos y se nos ponía por delante, algo inaudito. Pero reaccionamos luego sorprendentemente con un parcial de 3-15, que nos ponía de nuevo 5 arriba al acabar el cuarto. Aún mandábamos 61-64 a falta de tres minutos, aunque nuestros ataques eran cada vez peores y el rival apretaba a todo el campo y siempre en líneas de pase. Se nos veía cansados y sin ideas. Nos habíamos quedado con siete jugadores tras la lesión de Juan Carlos, fundamental porque hace de todo, hasta subir la pelota (no contábamos con ninguno de nuestros teóricos bases, Sergio y Javi Salvia) y defendimos muy mal la jugada en la que se nos ponían uno arriba. Luego fallamos los ataques y el resultado fue la pérdida de un partido que podíamos haber ganado.
Anotadores: Fran 14, Luis 9, Juan Carlos 11, Paco 5, Luchy 5, Carri 9, Jordi 7 y Rafa Peris 4.
La semana que viene jugamos en Navajas al ser nuestro campo colegio electoral, que ya sabemos que vale para todo. Domingo a las siete menos cuarto, nuestro horario habitual. El rival es el Almassora, que este año parece que se ha reforzado bien, a la luz de su lugar en la clasificación. Nosotros no podremos contar con Carri, en una mesa electoral, y suponemos que tampoco con Juan Carlos. A ver si Agust ya está mejor. Sergio aún será baja.
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